POR: METALMAN
(Revisión 2.0)
Hablar
de Richard Corben es sencillo: Basta con decir que es uno de los dibujantes más carismáticos del sector, además de
ser todo un maestro indiscutible en lo que respecta a crear rostros ricos en
matices y cuerpos capaces de expresar su propio lenguaje.
Hasta prácticamente entrados los años 70, la puritánica sociedad estadounidense consideraba como un delito incluir cualquier tipo de referencia explicita en un cómic. Como todos bien sabemos, no hay nada más seductor para un rebelde que romper las normas.
El maestro Corben, entre otros de gran importancia, fue uno de los pioneros dentro del "Comix", y parte culpable de que hoy en día el "tebeo" sea considerado como un medio adulto. Sangre, sexo, drogas, todo cabe desde entonces. La diferencia entre este tipo y otros de su generación y misma causa, es que era realmente un genio. Uno demasiado perfeccionista.
Como a todos los perfeccionistas dentro del mundo del cómic, a Corben le pasó factura su talento, viéndose obligado a rebajar las calidades que imprimía en sus obras (y aún así, sus trabajos seguían desbordando calidad), eliminando en ocasiones su tan aclamada técnica del color (pocos artistas consiguen la sensación de volumen de Corben) y en otras reduciendo drásticamente el detalle general. Las editoriales se frotaban las manos con su material…pero 8 páginas cada dos meses no eran suficientes para la voraz y estúpida industria.
El maestro Corben, entre otros de gran importancia, fue uno de los pioneros dentro del "Comix", y parte culpable de que hoy en día el "tebeo" sea considerado como un medio adulto. Sangre, sexo, drogas, todo cabe desde entonces. La diferencia entre este tipo y otros de su generación y misma causa, es que era realmente un genio. Uno demasiado perfeccionista.
Como a todos los perfeccionistas dentro del mundo del cómic, a Corben le pasó factura su talento, viéndose obligado a rebajar las calidades que imprimía en sus obras (y aún así, sus trabajos seguían desbordando calidad), eliminando en ocasiones su tan aclamada técnica del color (pocos artistas consiguen la sensación de volumen de Corben) y en otras reduciendo drásticamente el detalle general. Las editoriales se frotaban las manos con su material…pero 8 páginas cada dos meses no eran suficientes para la voraz y estúpida industria.
Muchos
de los lectores más jóvenes le habrán conocido por sus geniales trabajos en Marvel, DC, Dark Horse y demás
publicaciones de ese estilo, pero el auténtico Corben
no se encuentra en esas obras. Para conocerlo hay que viajar a los 70 y los 80,
con la obligación de disfrutar con dos de sus obras cumbre: DEN y la que hoy nos ocupa, MUNDO
MUTANTE.
Mutant World ya era la obra de
un dibujante de culto, pues desde 1973 Corben
disfrutaba de una popularidad en aumento gracias, sobretodo, a la inigualable DEN. Así pues, en 1978, y tras la publicación de otras
historias que no pudieron igualarla, el dibujante se encontraba en un momento difícil: ¿Cómo podía
superar a su obra más celebre?
Corben lo pasó mal de inicio, realizando diversos bocetos que
no terminaban de conducirle al lugar deseado, así que decidió contar con la
ayuda de alguien afín: Jan Strnad,
quién se ocuparía de dar profundidad y carisma auténtico al guión.
Entre
ambos crearon la que sería una de las mejores historias post-apocalípticas
jamás realizadas, conocida en todo el mundo gracias a las publicaciones de la
época, tales como la mítica 1984 (así la conocí
yo).
En
esta fantástica obra de ciencia ficción, y ocultos matices antibelicistas y
misántropos, se nos narran las aventuras de Dimento, un superviviente del holocausto nuclear, cuyo rasgo más
significativo es la inocencia absoluta en su forma de concebir la realidad.
Dimento recorrerá el mundo encontrándose con seres de
diferente índole, desde monjes ultra-religiosos, hasta simples supervivientes
sin esperanza o auténticos depredadores del nuevo orden. Todo dentro de un
marco salvaje y potencialmente peligroso. El nuevo mundo es implacable.
Es
una obra de fácil lectura, con un uso ejemplar del dibujo y un derroche de
pasión en la gestualidad y comportamiento del protagonista. A niveles de
empatía jamás he leído un cómic con algún personaje principal tan expresivo como Dimento.
Como
sello implícito de Corben, la obra
muestra violencia y sexualidad sin tapujos, pero siempre desde el buen gusto y
evitando que cobre un protagonismo que no merece. Es brutal e impactante, avisados estáis.
Mundo Mutante es una obra
maestra del cómic de ciencia ficción, y uno de los trabajos más increíbles de Richard Corben. Años más tarde intentó
continuar la obra con la también fantástica Hijos del
mundo mutante, donde cobraba protagonismo la hija de Dimento. Aunque la obra atesoraba calidad
suficiente como para recomendarla, supuso un bajón evidente en comparación con
la original. Sobre todo en la falta de expresión de su nueva protagonista.
Esta
obra también se vio afectada por las bajas ventas que consiguió de inicio,
obligando a Corben a convertirla, a
partir de su segunda publicación, en un cómic en blanco y negro. Aun con todo,
es recomendable al 100% si ya habéis consumido Mundo Mutante…aunque puede que al poco de iniciar su lectura…os llevéis una
triste sorpresa.
Una
obra imprescindible para cualquier amante del cómic con clase. Una de las obras
más importantes de los 70 y la consagración de Corben como maestro del medio (Sin quitarle merito alguno a Jan Strnad).
Y como siempre recomiendo, a pesar de resultar impopular: Comprar las obras originales, no les regaléis ni un euro a los que se forran con la publicidad que generan sus descargas.
Muy interesante lo que cuentas sobre Corben, me encanta saber cómo ha sido el proceso del artista con su obra, y si bien el gran amante de comics en mi familia es mi hermano, a mí de vez en cuando me "inspira" a leer algo... Buscaré Mundo Mutante, me atrae la trama...
ResponderEliminarSaludos,
Fabiana
traffic club
Gracias por comentar Fabiana, un Saludo!!
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