viernes, 24 de octubre de 2014

EDGUY: HELLFIRE CLUB


POR: METALMAN

Mandrake y Hellfire club son dos discos básicos para cualquier amante del Power y del Heavy en general. Hoy nos vamos a centrar en el segundo, por ser el disco más potente de toda la discografía de estos germanos.

Si buscáis información sobre el Hellfire Club podréis llegar a un par de conclusiones bastante llamativas, aunque la importante y la que aquí se retrata, en mayor grado, es la de su principal fin.

Se trataba de una "hermandad" cuyo principio básico era hacer prevalecer el placer y los valores más positivos y epicúreos sobre el resto. 

Uno de sus mayores intereses fue el de intentar demostrar que las religiones tenían un fin similar al de un yugo sobre cualquier animal, por lo que fueron considerados como satánicos. 


La realidad, lejos de machos cabríos y de pentagramas, fue que se trataba de "simples" libre-pensadores que creían en la existencia de un mal humano que podía eliminarse, para centrarse en otros aspectos más positivos, como el saber práctico y filosófico. Cualquiera que enseñe un valor no establecido, o una verdad incómoda, es siempre tachado de mala manera.

El disco de Edguy no retrata ninguno de sus hechos, aunque sirve de tributo al estar realizado pensando en ese placer, y también porque es cultura e ideas propias, alejadas de convencionalismos establecidos.   

Es un trabajo producido por Sascha Paeth, mezclado por Mikko Karmila y masterizado por Miko Jussila. A muchos les sonará a chino, pero su participación significa calidad. Calidad al más alto nivel. (Sin olvidarnos de otro dato importante: la pasta la puso Nuclear Blast, así que no era una producción barata).


Le sumamos la participación de Thomas RettkeAmanda Somerville y Oliver Hartman, más el cameo de ese genio misántropo que es Mille Petrozza y ya tenemos un disco de lo más interesante. Pero no se queda ahí la cosa.

Lo más llamativo, y su principal encanto, es que se trata de un trabajo mucho más Heavy de lo normal (aunque Mandrake fue también una maldita explosión), ya que Edguy se había centrado en sonar de forma más melódica y más cercana a grupos como Helloween, que a otros como Maiden o Judas Priest.

La elección de estos estilos hace que suene mucho más rudo y que contenga unos trabajos de batería y unos riffs muy distintos a los de sus primeros trabajos (discos que yo jamás he disfrutado plenamente, por resultarme un tanto indiferentes).


Suena salvaje y mucho más bruto, aun teniendo temas más de su estilo clásico. Pistas como Under the MoonMysteria o We dont need a hero son la traca. Emocionantes, "espídicas" y muy poderosas, de esas que te hacen sentir más macho/hembra.

Es más Heavy que Power, o muy Heavy y muy Power, pero en cualquier caso, se aleja un tanto de su clásica predilección por la melodía (que también la tiene, ojo, pero debajo de la potente distorsión).

Es un disco básico y muy necesario, y no tiene por qué gustaros la banda para poder disfrutarlo (e insisto: lo mismo sucede con Mandrake).


Mi recomendación, aunque es bastante complicado, es hacerse con el DVD-Audio que editaron, que cuenta con una calidad de sonido que jamás encontraréis en un CD o en un archivo mp3. Es caro y difícil de localizar, pero merece la pena. 

El disco cuenta con 12 temas en su edición normal, aunque lo suyo es optar por la que adjunta dos bonus tracks, siendo una de ellas la versión de Mysteria interpretada por Mille Petrozza, y la fantástica Children of Steel.

Como simple curiosiodad, en la MTV se negaron a emitir su vídeoclip de Lavatory Love Machine (muy cómico y rockanrolero) por considerarlo ofensivo y hortera. Me alegro. 

Para mi: lo mejor de Edguy. Fucking with fire!!




No hay comentarios:

Publicar un comentario