POR: METALMAN
(Revisión 2.0)
(Revisión 2.0)
Hablar de Shinobi es hacerlo sobre uno de los títulos más míticos de Sega y de todo el panorama arcade de los 80, pudiendo considerarse como uno de los juegos más carismáticos jamás concebidos por compañía alguna, e icono número uno de ese fantástico subgénero llamado Action Ninja.
Durante 1987 Sega lanzó un título que puede catalogarse como uno de los más grandes arcades jamás programados, ya que contaba con unas calidades jugables y técnicas simplemente memorables. Era el momento de los ninjas y del boom asiático "masivo" en torno a las artes marciales, y en la compañía del puercoespín azul no se durmió nadie en los laureles: ¿queréis ninjas? pues aquí tenéis el mejor juego recreativo de su estilo.
Este título no fue otro más que el celebérrimo Shinobi, creado por Yukata Sugano, quien también participó, años después y a niveles más modestos, en la creación de Sonic 2, Panzer Dragoon y The House of the Dead (entre muchos otros). Sugano, por desgracia, ha sido un tipo al que apenas se le ha puesto cara, aunque sus aptitudes se han podido disfrutar en títulos más modernos, como Blinx (Xbox) o Blue Dragon (Xbox 360).
No existe demasiada información al respecto, pero es sabido que durante un periodo posterior a Shinobi fue uno de los hombres de confianza de la compañía, y se le trasladó a Sega America para la supervisión de una cantidad ingente de proyectos.
El juego original fue lanzado para el magnífico System 16 de Sega, placa arcade que nos ha deleitado, en sus varias revisiones, con joyas de auténtico calado, como Altered Beast, ESWAT o Golden Axe.
En el caso que nos ocupa, se trataba de un juego de acción y desplazamiento horizontal, con un muy leve componente de plataformas (debido a transcurrir a diferentes alturas) que retrataba esa extraña y fantástica mezcla, tan de aquellos momentos, entre leyendas de ninjas y tiempos modernos.
La trama de Shinobi nos contaba como una extraña corporación, llamada Zeed, se dedicó a secuestrar a los niños del clan Oboro (en algunas fuentes se afirma que pertenecen al clan Iga), con la malsana intención de adoctrinarlos, y así poder crear un ejercito propio para dominar el mundo. Digamos que este clan estaba compuesto por una especie de "ninjas del lado luminoso".
Con lo que estos gangsters a gran escala no contaban era con la aparición de Joe Musashi, el guerrero ninja más aventajado y letal del clan Oboro, quien decidiría no solo rescatar a los infantes, sino también descubrir las instalaciones secretas de la organización y destruirlas, eliminando con ellas a sus líderes.
Acababa de nacer uno de los héroes "videojueguiles" más importantes y carismáticos de todos los tiempos, sin exagerar. Junto a Ryu Hayabusa (Ninja Gaiden) Musashi puede considerarse como el personaje ninja más famoso de los videojuegos.
Tras el éxito mundial del arcade, y ya en 1988, Sega lanzaba en su sistema de sobremesa de 8Bits el port de la recreativa, aportando ciertos cambios y asumiendo algunas limitaciones, pero manteniendo toda la esencia del original.
Y es que, si bien existe un mundo entre la versión original y la de Master System, es de recibo reconocer el virtuosismo empleado en esta conversión, cuyos niveles de calidad son, sin exagerar, de los más altos que posee juego alguno dentro del sistema.
Para la ocasión, Sega decidió empezar por rebajar la dificultad del título, añadiendo una barra de vida al personaje principal y descartando de este modo al "one hit kills" de la placa recreativa.
Este título no fue otro más que el celebérrimo Shinobi, creado por Yukata Sugano, quien también participó, años después y a niveles más modestos, en la creación de Sonic 2, Panzer Dragoon y The House of the Dead (entre muchos otros). Sugano, por desgracia, ha sido un tipo al que apenas se le ha puesto cara, aunque sus aptitudes se han podido disfrutar en títulos más modernos, como Blinx (Xbox) o Blue Dragon (Xbox 360).
No existe demasiada información al respecto, pero es sabido que durante un periodo posterior a Shinobi fue uno de los hombres de confianza de la compañía, y se le trasladó a Sega America para la supervisión de una cantidad ingente de proyectos.
El juego original fue lanzado para el magnífico System 16 de Sega, placa arcade que nos ha deleitado, en sus varias revisiones, con joyas de auténtico calado, como Altered Beast, ESWAT o Golden Axe.
En el caso que nos ocupa, se trataba de un juego de acción y desplazamiento horizontal, con un muy leve componente de plataformas (debido a transcurrir a diferentes alturas) que retrataba esa extraña y fantástica mezcla, tan de aquellos momentos, entre leyendas de ninjas y tiempos modernos.
La trama de Shinobi nos contaba como una extraña corporación, llamada Zeed, se dedicó a secuestrar a los niños del clan Oboro (en algunas fuentes se afirma que pertenecen al clan Iga), con la malsana intención de adoctrinarlos, y así poder crear un ejercito propio para dominar el mundo. Digamos que este clan estaba compuesto por una especie de "ninjas del lado luminoso".
Con lo que estos gangsters a gran escala no contaban era con la aparición de Joe Musashi, el guerrero ninja más aventajado y letal del clan Oboro, quien decidiría no solo rescatar a los infantes, sino también descubrir las instalaciones secretas de la organización y destruirlas, eliminando con ellas a sus líderes.
Tras el éxito mundial del arcade, y ya en 1988, Sega lanzaba en su sistema de sobremesa de 8Bits el port de la recreativa, aportando ciertos cambios y asumiendo algunas limitaciones, pero manteniendo toda la esencia del original.
Y es que, si bien existe un mundo entre la versión original y la de Master System, es de recibo reconocer el virtuosismo empleado en esta conversión, cuyos niveles de calidad son, sin exagerar, de los más altos que posee juego alguno dentro del sistema.
Para la ocasión, Sega decidió empezar por rebajar la dificultad del título, añadiendo una barra de vida al personaje principal y descartando de este modo al "one hit kills" de la placa recreativa.
Siguiendo con el port de Master System, nos encontramos ante un juego sumamente colorista, suave, bien definido en cada uno de sus sprites y con un tamaño generoso para los mismos. Se respeta el diseño de las fases, de las melodías originales y de los final bosses, contando también con las fabulosas pantallas de bonus de su versión recreativa (uno de los mejores niveles extras jamás diseñados).
Desde mi punto de vista, el único problema destacable (y es del todo lógico, pues hablamos de una máquina de 8Bits muy limitada en cuestiones de Ram) pasa por su horrendo scroll vertical, haciendo que se detenga la acción cuando pasamos a un nivel superior (o inferior). Salvando este incoveniente (que no afecta a nivel jugable, pero que afea al conjunto), el resto es magistral.
En cuestiones de control y jugabilidad sucede exactamente lo mismo (en relación a la calidad ya comentada), y cuenta con una respuesta del todo efectiva y muy bien programada. Se podría decir que hilaron realmente fino.
Centrándonos en algunas de las diferencias propias de esta versión, debemos añadir que ahora Musashi cuenta con un repertorio de armas mayor, pudiendo utilizar unos Nunchakus y algún ataque extra en cuerpo a cuerpo, entre otros. También cambia el hecho de no tener que rescatar por obligación a todos los niños (necesario en el arcade), pasando a ser optativo pero muy recomendable, pues son los que nos otorgan los power ups y las recuperaciones de salud.
Liberarlos a todos nos permite acceder a las pantallas de bonus, y estas, al ser completadas con éxito, nos proveen de los poderes Ninja. En el juego original estas fases aparecen tras los enfrentamientos contra los jefes, mientras que en Master System lo hacen tras cada nivel normal. Se respeta también el sistema de fases y subfases, contando con los cinco niveles originales y con sus pantallas divisorias.
Aun siendo tan bueno y tan meritorio dentro de su sistema, jamás entendí que Sega no lo convirtiera para Megadrive, pues aun celebrando la versión existente, los fans hubiésemos dado cualquier cosa con tal de disfrutar de un port 100% fiel...pero bueno, nos compensaron con el increíble The revenge of Shinobi, que no es poco.
Shinobi, para Master System, es uno de los más grandes títulos de la plataforma, siendo un cartucho realmente imprescindible para los coleccionistas y, posiblemente, el mejor juego de acción de este infravalorado sistema. Es altamente recomendable jugarlo a 60hz, pues de esta forma evitaremos el aspecto achatado de la versión PAL, a la vez que disfrutaremos del ritmo original, algo más adecuado y dinámico que en las versiones europeas. Añadir, como es lógico, que tendréis que modificar la consola para que emita en 60hz.
Si sois los poseedores de una Master System "1", el cableado RGB original es sencillo de conseguir (es el mismo que en Megadrive/Genesis "1"), y si por contra contáis con una Máster System 2, estáis casi obligados a modificarla para sacar señal de vídeo compuesto o, mucho mejor, RGB. (La versión 2, al menos en Europa, venía de serie única y exclusivamente con conexión de antena).
Para despedirme, solo recalcar que la versión para NES, programada por Tengen con licencia de Sega, pero sin el sello de calidad de Nintendo (y aun partiendo de este fenomenal port) no logra en absoluto sus resultados, acabando en un producto menor y bastante mal adaptado.
-IMPRESCINDIBLE-
Que grande!!! Yo nunca fui capaz (en la recreativa) de pasar de la primera pantalla. Nunca llegué al primer bonus de las estrellas ninja... una pena.
ResponderEliminarbueno, siempre puedes arreglarlo con la versión que tienes del Live, que es la recreativa emulada.
EliminarAbrazos man!!
El shinobi es grande pero si es verdad que era chungo para la época y en comparación con otros de su clase como shadow dancer, double dragon o dragonninja.
ResponderEliminarShinobi 3, un juegaco ¿para cuando?
Antes voy con Shinobi II, que aunque no tan espectacular es también la rehostia (y mucho más chungo).
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