KAMELOT: EPICA

POR: METALMAN

Grupos que sepan combinar con acierto el Metal progresivo con el melódico existen pocos, y que además cuenten con una calidad compositiva alta, con letras espectaculares y muy inspiradas, junto a un acabado de producción soberbio, menos aun. Puede que Kamelot, con su EPICA, llegase hasta la misma cumbre de su estilo.

Marlowe, Spies, Lessing, Goethe...el tiempo siempre tuvo presente a Fausto, o al menos a su forma literal, ya que el auténtico poco, o nada, tenía que ver con ese ser insatisfecho que decidió pactar con el diablo.

Lo cierto es que este fantástico Fausto ha sido, de forma continuada e imparable, convertido una y otra vez a diversos medios, ya fuere en forma de musical, de film o de obra sonora, como en este caso.

Kamelot se decidió por la más trascendente de sus formas, la universalmente aclamada obra escrita de Goethe, para inspirarse.  Para los que desconozcan esta imprescindible tragedia, tan solo comentarles que el tema diabólico apenas es trascendente tal cual, y se trata de una obra que analiza y retrata al mundo del 1700/800, con sus inquietudes políticas, sociales, religiosas y morales, envolviéndolo todo dentro de una mística bastante peculiar. Tranquilos, no es una obra satánica...
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A un lado su temática, que refleja muy bien ciertas inquietudes de la obra, nos encontramos ante el que es, desde mi humilde punto de vista, el trabajo más exquisito de la banda, y también el último que hace especial énfasis en la melodía y épica clásica ante el sonido más oscuro e industrial.

No es que Kamelot se apagase o empezase a sonar más sintético, pero indudablemente se puede decir que su camino se tornó algo más oscuro a niveles de producción. 

Es un disco que viaja mucho más allá del tono Power-melódico de sus anteriores trabajos, que ya coqueteaban con el progresivo, pero de refilón. Aquí son los ritmos clásicos los que conforman minoría, dejando más espacio a temas lentos y de medio tiempo, que juegan con reglas no escritas: Progresivo en estado puro.

En cierto modo, es un disco que me recuerda al estilo cambiante que poseía la antigua banda de Khan, Conception, en donde se mezclaban de forma brutal los riffs más potentes con auténtica poesía.

Temas como Lost & Dammed (una obra maestra del Metal) o la no menos impresionante A Feast for the Vain, son de una calidad compositiva que asusta, acompañadas en todo momento por una calidad vocal simplemente irrepetible.

Podría resultar en un álbum muy sesudo para aquel que simplemente busque "caña", o demasiado limpio para el que está habituado a sonidos más oscuros, pero al que disfrute del melódico, del power o de grupos que coqueteen con la composición clásica, puedo asegurar que le llegará al alma.
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Es muy posible que cualquier seguidor me contradiga, y que piense que es un error nombrar a EPICA como al mejor de sus discos, pero es que Kamelot, desde el fallido Siegue Perilous, no ha lanzado ningún álbum que pueda considerarse malo...así que puede ser una simple cuestión de gustos.

Cabe comentar que EPICA representa la primera parte de la obra de Goethe, la cual continuaron en su siguiente disco: The Black Halo.

Es sabido, al menos entre la comunidad metalera, que este álbum sirvió para dar nombre a la formación EPICA, quienes se consideraban auténticos fans de Kamelot.

Recomendado al 100%, de verdad que es una obra maestra de su estilo.

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