sábado, 4 de octubre de 2014

ZOMBIES: ATE MY NEIGHBORS


POR: METALMAN
(Revisión 2.0)

Aun con censuras absurdas de por medio, Zombies Ate My Neighbors fue un juego que caló bastante entre el público, tanto por su acertado diseño, inspirado en el cine de terror de serie B, como por su propuesta jugable, heredera directa de clásicos como Gaunlet.

Zombies es, por desgracia, uno de tantos títulos olvidados injustamente, ya que se trata de una obra que en su momento causó bastante revuelo, además de conquistar a todas las audiencias. Tanto crítica como público lo aplaudieron hasta partirse las muñecas...aunque, aun con esto, jamás llegó a convertirse en un best seller.

La genial obra de la extinta Lucas Arts se inspira, en su concepto de diseño, en toda la obra fílmica de terror existente desde los años 50 hasta los 80, haciendo referencia directa (aunque no licenciada) a los monstruos clásicos de la Hammer, a villanos como Jason, de Viernes 13, e incluso a los Zombies del maestro Romero.

Se trata de un juego basado en la acción y en la exploración, cuya finalidad consiste en rescatar a todos los supervivientes posibles de cada escenario y, tras ello, encontrar la salida del nivel en cuestión. 

Para progresar durante las fases nos veremos forzados a buscar llaves, recolectar diversos items y disparar a todo lo que se mueva. Todo ello desde una perspectiva cenital bastante acertada para el tipo de juego que se nos propone, y acompañados siempre por un útil mapa que nos resaltará los elementos prioritarios. (No quiero olvidarme de lo geniales que son los potenciadores que nos transforman en bestias, y que convierten durante unos segundos a nuestros personajes en criaturas imparables...)


Zombies Ate My Neighbors puede jugarse tanto en solitario como en modo de dobles, siendo este último el más recomendable. La abundante cantidad de enemigos de algunas fases, más el tremendo pique que se genera al contar con alguien al lado (ambos puntuarán por separado al liberar a las víctimas, y lucharán por hacerse con los mejores power ups, por ejemplo), lo convierte en uno de los más grandes cooperativos de su tiempo. 

Aun siendo un título realmente llamativo y atractivo para la vista, nos encontramos ante un juego que no ofrece ningún tipo de técnica deslumbrante, y que basa todo su encanto en un diseño paródico sin igual, con mapeados bastante grandes y a rebosar de enemigos de variadas formas y tamaños (algunos descomunales).

Es colorido, divertido a nivel visual y está repleto de referencias por todas partes. Sus animaciones y sus FX ayudan a potenciar esa sensación cómica que impregna toda la pantalla, pero cuidado: aun siendo una descarada parodia, los comportamientos de los enemigos, la potencia de destrucción de algunos de ellos y su velocidad, pueden provocar momentos de estrés...  

Su título fue acortado por problemas de audiencias (censura) en la mayor parte del globo, eliminando la coletilla “Ate My Neighbors”. Además, algunos efectos del juego fueron alterados en la mayoría de mercados, como pudo ser el caso de la sangre "roja", a la que dotaron de un aspecto verdoso y morado… era la típica técnica Nintendera de la época. La versión más fiel y con menos recortes es la aparecida en USA, para el sistema Genesis, de Sega.



Como dato irrelevante, y volviendo al tema de la censura, me gustaría comentar que en la mayoría de países europeos el juego sufrió un extraño cambio: se eliminaron los personajes con motosierra, y en vez de estos fueron mostrados enemigos con aspecto de leñador…sí, es incomprensible, pues se puede considerar igual de salvaje atacar a alguien con un hacha que con una sierra eléctrica. La censura es, la mayoría de las veces, tan estúpida e ilógica como los que la validan.

Lucas Arts lanzó al mercado (un año más tarde, en 1994) una segunda parte que jamás obtuvo el beneplácito de la crítica, entre otras cosas, por ser un producto inicialmente no concebido como la secuela de este juego, adaptando material de otro arcade desechado y cambiando su título por el de Ghoul Patrol. Para los más curiosos, mencionar que existe una secuela espiritual de Zombies, llamada Herc´s Adventuresaparecida para los sistemas PSX y Saturn, y que cuenta con el mismo concepto y desarrollo, pero creando una parodia de la mitología griega (es un título bastante difícil de conseguir).

El punto fuerte de cualquier juego que se precie debe ser su diversión, y sin duda que Zombies destaca en este aspecto, pero por aquellos tiempos, los ya lejanos años 90, existía un factor que también había que tomar en cuenta: La duración. Zombies consta de 48 niveles principales, 6 de bonus y un nivel secreto tras los créditos finales. El primero de los niveles extra es un guiño a Day of the Tentacle y el nivel final secreto son las oficinas de Lucas Arts

Podrá no pareceros demasiado generoso en cantidades, pero estamos hablando de una época en la que el estándar podía ser, fácilmente, de entre 6 y 10 fases. Encontrar un buen juego que contuviera más de 50, y que resultara agradable de jugar, no era lo típico. (Ojo, porque esto tampoco excluye que se dieran casos similares, y ya existían juegos bastante duraderos).  


Centrándome de nuevo en las cosas propias de aquellos tiempos, os diré a los más jóvenes que era bastante común encontrarse con un juego diferente por cada plataforma, y aquí si que era imperante lo de estudiar bien que juego elegir y para qué formato. En cualquier caso, Zombies era prácticamente un calco, con las diferencias típicas de estas dos plataformas (SNES y Megadrive), pero igual en términos generales.
  
La versión para SNES posee una paleta de color bastante más extensa que la de Megadrive, además de mostrar el radar mediante transparencias (sobre la pantalla). Megadrive, en cambio, ofrece una representación más ruda y nítida (pero menos agradable en conjunto) de todo lo que aparece ante nuestros ojos, además de incluir los indicadores (vida, puntuación…) y el radar en un lateral, creando un efecto Wide-Screen (sobre 4:3) del juego. (En las dos versiones se muestra la misma cantidad de mapeado, pero en SNES es más ancho).

Otra de sus diferencias más significativas (aunque poco importante, desde mi punto de vista) es exclusiva de la versión para la 16Bit de Nintendo, ya que incorpora un arma propia, el lanzallamas, no presente en la consola de Sega.

Siguiendo con la comparativa entre sistemas, he de destacar que la versión de SNES gana por goleada en un aspecto muy concreto: el sonido. Es sabido por cualquier gamer de aquella época que el fabuloso chip sonoro de Nintendo, bien empleado, no tenía rival con quien medirse, y en este caso estaba muy bien utilizado... En cualquier caso, la versión de Sega posee un apartado sonoro más que digno, a pesar de sus limitaciones, y para nada se trata de desmerecer a esta versión (es más, yo la prefiero por su nitidez).



Zombies cuenta con un sonido genuino y muy acorde con lo que propone durante su transcurso, gracias a un apartado sonoro creado por Joe McDermott, famoso compositor de música para niños, cuya mayor virtud, en este caso, ha sido la de transmitir un tempo que viaja sabiamente entre el misterio y la comedia, empleando para ello unos sonidos muy típicos de las viejas producciones de terror.

Tanto en BSO como en FX, Zombies es un título agradable y carismático, siendo estos, junto al diseño gráfico, sus elementos más característicos y definitorios.

Zombies es un arcade inteligente y desafiante, duradero y variado en la medida de lo posible, que cuenta con muy buenas rutinas de IA para los enemigos y que posee una ambientación exquisita. Podrá gustar más, o menos, pero está rodeado por unas calidades indiscutibles en todos y cada uno de sus apartados.

Es bueno, bonito y no demasiado caro o difícil de conseguir, y puede ser catalogado como todo un clásico oculto de la era 16 bits. Es un juego para amantes de lo retro, de la serie B, de la parodia y de la acción mostrada con un punto de inteligencia.



Se podría decir (exagerando un poco) que Zombies es el Dead Rising de su época. (Aunque debe quedar claro que, sin duda alguna, la referencia más exacta que podemos encontrar, en cuanto a mecánicas y similitudes, es el clásico Gaunlet).

Zombies lo tiene todo para seguir siendo largamente recordado. Un título con todo lo bueno de la vieja escuela y un abultado carisma.




4 comentarios:

  1. Una auténtica joya!! Divertido a más no poder, me quedo con la versión de SNES como casi siempre. Pero es un juegazo para cualquier consola.

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    1. Es un juegazo como la copa de un pino, y auqnue pasen los años no envejece. De lo mejor para echarse unas partidas a dobles.

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  2. Un videojuego estupendo del que ya ni me acordaba. Me acuerdo que en su día antes de lanzarlo lo vendían como si fuese un juego de terror, y es cierto que levantó cierto revuelo. Muy buena entrada.

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    1. Sí, yo también recuerdo haber leído sobre el mismo antes de que fuese lanzado, y se hablaba de terror...aunque el terror en 16bits era muy complicado, y en el fondo es un juego de terror, lo que no da es miedo...pero es de terror cómico.

      Gracias por comentar!!

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