MURDERED: SOUL SUSPECT

POR: METALMAN

Es curioso, al menos para el aquí presente, que dentro del videojuego existan tan pocos ejemplos basados en historias de fantasmas, ya que suelen resultar altamente atractivas para cualquier tipo de público. Creo que nadie le diría que no a un buen juego de este estilo, aunque claro, primero habría que encontrarlo...

No me andaré por las ramas: Tenía toda mi fe depositada en Murdered: Soul Suspect, y lo venía siguiendo desde que contemplé su primer trailer. No se estilan demasiado las historias de fantasmas (y nunca entenderé el motivo), y apenas se puede disfrutar con Geist (2005), Ghost Master (2003), Project Zero (2001) o con Haunting (1993), que son buenos juegos, pero muy alejados del elemento romántico, terrorífico y gótico que suelen contener estas historias (Geist se aproxima bastante, aunque vira más hacia la SciFi, y Project Zero es terror puro).

En este caso el planteamiento me seducía bastante, sobre todo por ese enfoque de controlar al fantasma como protagonista, y más aun teniendo en cuenta que se trataba de un detective que tendría que investigar su propia muerte.

Solo con esto ya se volvía apetecible y resultaba altamente atractivo, pero parece que cuanto más deseas algo, más turbio se vuelve.

En este juego "encarnamos" al detective O´Connor, quien se encuentra en plena investigación de una serie de asesinatos cometidos por alguien bautizado como El Campanero. 

O´Connor le localiza, y se enfrenta al mismo dentro de un apartamento, en un tercer piso...pero la cosa se tuerce, y nuestro héroe acaba por salir disparado por la ventana del edificio y aterrizando en la calle.

El protagonista se levanta del suelo tras el impacto, pero algo no va bien: su cuerpo sigue tendido en el frío suelo, y presencia como el asesino lo remata.

Así pues, O´Connor se convierte en testigo de su propia muerte, y además de averiguar cómo funciona ese nuevo mundo nebuloso, y cuales son sus reglas, tendrá que dar caza a quien le asesinó, para poder descansar en paz y abandonar esa especie de Umbra.

Sigue sonando realmente bien, para qué nos vamos a engañar, y con tan solo este extracto de la historia ya nos valdría para imaginar que es un juego realmente chulo...pero no es así. Murdered: Soul Suspect funciona a nivel argumental y, aun siendo tan solo correcto a nivel gráfico, también resulta válido a niveles plásticos.

Se pierde en torno a sus mecánicas, que son repetitivas, simples y están mal implementadas. Os sonará extraño (es extraño!), pero es como una mezcla entre una aventura gráfica de toda la vida (buscando diferentes elementos por el escenario) y un juego de acción y ocultación tipo Splinter Cell....(Salvando las distancias)

Pudo salir bien, y cosas más descabelladas se han visto dentro del panorama (Hitman Absolution sería un buen ejemplo), pero no es el caso. Ninguna es fluida o está bien medida, y esto se agudiza más según van pasando las horas, ya que al no funcionar, y al utilizarse constantemente, se vuelven incómodas. Es demasiado repetitivo el tener que poseer a la gente para escuchar sandeces, y lo mismo ocurre con la constante ocultación dentro de "los fragmentos de los espíritus".

Termina por importar un carajo su historia (que está demasiado fragmentada), ya que es tedioso avanzar para averiguar algo sobre la misma, y a ello se suma la absurda cantidad de historias paralelas (aunque desconectadas del guión principal) que encontraremos dispersas sobre los escenarios.

Estas "misiones" tienen un punto bueno: son pequeñas historias de fantasmas, a los que tendremos que ayudar buscando pruebas y resolviendo su situación, para que puedan pasar "al otro lado", pero se basan en recorrer los escenarios una y otra vez en busca de las mismas, y resulta monótono.

El entorno no está mal, y la forma elegida para mostrar ese gran pasillo entre la vida y la muerte es atractivo (al igual que los personajes con más peso). Inclusive el hecho de saber que transitamos por el pueblo de Salem (inspiración de no pocas historias de terror) es un punto a favor. Pero no basta.

O es un juego realizado con prisas, o es uno re-hecho sin un rumbo fijo. Parece forzada su mezcla, y momentos como la posesión de los gatos (penoso) o los enfrentamientos contra los demonios (ridículo) lo dejan bien claro.

El resto: poseer a humanos para poder escuchar sus pensamientos (lo que a veces se traduce en pistas), en una serie de frases que se repiten una y otra vez hasta dejarnos noqueados con su aburrido contenido.

Por desgracia, es uno de los juegos más insípidos que he jugado en décadas. Resulta atractiva su ambientación, su acabado (y me refiero al diseño, porque insisto en su poco poderío gráfico) y su base fantasmagórica, pero no lo compréis por su precio de origen (40/69€).

Es un producto que puede llegar a engañar, ya que las primeras horas parecen bastante atractivas, por lo misterioso del guión y por el acabado en general, pero poco después se convierte en ese tedio del que os hablo.

Es una curiosidad, sin duda, pero poco más, y solo se lo recomiendo a los que les guste ese lado oscuro y tan pocas veces retratado dentro de este medio...aunque eso sí: solo si lo conseguís por un precio realmente bajo.

Me gustaría dejar en claro, y es una recomendación muy personal, que aunque el juego no funcione, a nivel de mecánicas, podría llegar a resultar atractivo por su atmósfera y guión, pero aun con esto, sus fallos son insalvables...

La diferencia entre versiones es mínima, y en PC y consolas de octava generación destaca por ser más fluido y por contar con mayor resolución que en PS3 y 360. En nada más.